Consejos para Iniciar a tus Hijos en Equitación
La equitación es un deporte maravilloso para los niños que enseña responsabilidad, desarrolla confianza y fomenta un vínculo especial entre el niño y el caballo. Si tu hijo o hija está ansioso por comenzar clases de equitación, aquí hay algunos consejos para ayudarlos a empezar de manera segura y exitosa:
1. Encuentra el programa de equitación adecuado
Busca un programa de equitación de buena reputación con instructores experimentados y caballos de escuela apropiados para principiantes. Pregunta sobre la edad mínima para las clases - la mayoría de los establos requieren que los niños tengan al menos 5-7 años. Considera si a tu hijo le iría mejor con clases privadas o en grupo. Las clases en grupo son más económicas y proporcionan interacción social, mientras que las clases privadas permiten una atención más individualizada. Observa una clase y recorre las instalaciones antes de comprometerte. Asegúrate de que el establo tenga altos estándares de seguridad y que el instructor mantenga un ambiente de aprendizaje positivo. No dudes en probar un programa diferente si no es el adecuado.
2. Invierte en el equipo de seguridad adecuado
La equitación conlleva algunos riesgos inherentes, pero el equipo de seguridad adecuado ayuda a minimizar la posibilidad de lesiones. Todo jinete necesita un casco de equitación certificado y bien ajustado. Deja que tu hijo elija su propio casco en un color o diseño divertido para que se entusiasme por usarlo.
Las botas de montar con un tacón de 1 pulgada son esenciales para evitar que el pie se deslice a través del estribo. Las botas de paddock y las medias botas son una opción versátil para los jinetes de estilo inglés, mientras que las botas vaqueras funcionan bien para el estilo western. Evita las botas de lluvia o nieve voluminosas que son demasiado anchas para los estribos. Los estribos de seguridad magnéticos Ophena S proporcionan un nivel extra de seguridad. Su diseño de lado abierto permite que el pie se libere fácilmente en caso de caída. Las plantillas magnéticas incluidas mejoran la estabilidad y el agarre del jinete. Aunque son una inversión, los estribos Ophena S son una opción valiosa para padres preocupados por la seguridad, especialmente para un niño que saltará. Los guantes de montar, chalecos y otros equipos de protección también pueden valer la pena considerar a medida que tu hijo avance. Da prioridad a la seguridad desde el primer día para inculcar buenos hábitos.
3. Vístete para la comodidad y la practicidad
Además del equipo de seguridad, tu hijo necesitará ropa de montar que permita libertad de movimiento y comodidad en la silla. Busca pantalones de montar elásticos y ajustados o mallas de equitación. Los jeans funcionan para el estilo western, pero no deben ser demasiado holgados. Combínalos con una camisa fajada y un cinturón. Es mejor evitar bolsillos, cremalleras y joyería colgante, ya que pueden engancharse en el equipo. En verano, elige camisas ligeras y transpirables y aplica protector solar. Para el clima más fresco, viste en capas delgadas que no restrinjan el movimiento. Guarda las sudaderas con temática de caballos para el viaje en coche de regreso a casa.
4. Enfatiza la buena práctica ecuestre desde el principio
La equitación es mucho más que simplemente sentarse en la silla. Anima a tu hijo a involucrarse en todos los aspectos de la práctica ecuestre, desde el cepillado y el ensillado hasta el enfriamiento de su caballo después de la clase. Aprender a manejar caballos en el suelo fomenta el respeto y desarrolla confianza. Supervisa de cerca a tu hijo en el establo, especialmente al principio. Enséñale a acercarse siempre a un caballo desde el frente, evitar caminar por detrás y mantener una actitud tranquila y positiva en su lenguaje corporal. Estas habilidades fundamentales servirán bien a tu joven jinete.
5. Sé paciente y positivo
Como cualquier nueva actividad, la equitación tiene una curva de aprendizaje. Algunos niños se adaptan inmediatamente, mientras que otros necesitan más tiempo para sentirse cómodos en la silla. Evita presionar a tu hijo para que avance más rápido de lo que está listo. Confía en su instructor para establecer un ritmo apropiado. Celebra las pequeñas victorias y no te detengas en los errores. Las caídas y los contratiempos son parte del proceso. Anima a tu hijo a volver a montar con una actitud positiva. Con tiempo y práctica, sus habilidades y confianza crecerán.
6. Haz amigos en el establo
El aspecto social de la equitación es una gran parte de lo que la hace divertida para muchos niños. Anima a tu hijo a charlar con los otros niños en su clase y a conocer a la "familia del establo". Para los niños tímidos, pide al instructor que facilite alguna interacción social. Considera inscribir a tu hijo en campamentos, clubes o actividades ecuestres en el establo para ayudarlos a hacer amigos que compartan su pasión. Puede que encuentres que el establo se convierte en el segundo hogar de tu hijo.
7. Establece metas realistas
Habla con tu hijo sobre lo que espera lograr con su equitación. ¿Sueñan con saltar, hacer carreras de barriles o montar por senderos? ¿Están interesados en competir o participar en 4-H? Trabaja con el instructor para establecer metas alcanzables que se alineen con las habilidades e intereses de tu hijo. Divide las metas grandes en hitos más pequeños, como dominar el trote elevado o galopar una vuelta completa en la pista. Celebra el progreso y evita comparar a tu hijo con otros jinetes. Con dedicación y práctica, continuarán creciendo y alcanzando nuevas alturas.
8. ¡Diviértete!
Sobre todo, la equitación debe ser agradable para tu hijo. Fomenta su amor por los caballos con visitas a eventos ecuestres, leyendo libros sobre caballos juntos o programando un paseo a caballo ocasional en familia. Anímalo a pasar tiempo creando un vínculo con su caballo además de las clases estructuradas. Recuerda, cada niño progresa a su propio ritmo. Mantén el enfoque en la diversión, la seguridad y la buena práctica ecuestre, y tu hijo estará preparado para el éxito en su viaje de equitación. Con la instrucción, el equipo y la actitud correctos, ganarán habilidades y confianza que los beneficiarán tanto dentro como fuera de la silla.