Introducción a las espuelas: cuándo usarlas y cómo elegir las adecuadas

i alguna vez has visto espuelas en Internet o en una tienda de montura, probablemente te habrás dado cuenta de que hay un montón de tipos diferentes de espuelas. Las hay largas y cortas, afiladas y sin filo. Las espuelas, al igual que la brida, la silla de montar y la fusta, se utilizan para influir en la respuesta y reacción de tu caballo a tus ayudas. En resumen, utilizas todas estas herramientas para refinar, reforzar y recompensar.

¿Por qué y cuándo debo usar espuelas?

Normalmente, los jinetes utilizan las espuelas para conseguir una reacción mejor y más rápida del caballo. Las espuelas se utilizan para animar a tu caballo a reaccionar más rápido a tu pierna, ya que, por naturaleza, los caballos pueden aburrirse con tu pierna.

También se pueden utilizar espuelas para la precisión. Un jinete de doma muy avanzado, por ejemplo, puede querer una reacción más precisa de su caballo al realizar cambios de tempo o piruetas. Las espuelas pueden ser una gran herramienta para ayudar al caballo a reaccionar con más precisión, sin más presión de la pierna.

Además, algunos caballos que son muy sensibles pueden beneficiarse del uso de espuelas. Cuando utilizas la espuela con suavidad en un caballo sensible, es una ayuda clara y ligera para él, y por tanto funciona como una gran recompensa.

Antes de ponerte las espuelas, debes asegurarte de que puedes cabalgar utilizando todas tus ayudas de forma independiente. Esto significa que debes ser capaz de utilizar el asiento sin agarrarte con las piernas, y utilizar la mano sin que afecte al asiento, etc.

También tienes que asegurarte de que tu caballo está preparado para las espuelas. Antes de poder utilizar las espuelas con tu caballo, éste debe estar familiarizado con el ritmo, la conexión y la flexibilidad. Sin estos elementos básicos, el uso de espuelas sólo confundirá a tu caballo. Por lo general, querrás utilizar las espuelas con un caballo que necesite ayuda para la rapidez o una mayor precisión.

¿Qué tipo de espuelas necesitas?

Debes utilizar lo menos posible, pero tanto como necesites. Las espuelas se suelen elegir de forma que sean relativas a la reacción del caballo. Se recomienda empezar con espuelas pequeñas (5 mm) y, tras unas cuantas cabalgatas, progresar a otras más largas, si es necesario.

Ten en cuenta también que las espuelas sin filo pueden ser una gran elección para los caballos sensibles, mientras que las más largas y afiladas pueden ser mejores para un caballo que necesita tanto rapidez en la pata como precisión.

Conclusión

Si no estás seguro del tipo de espuelas que debes usar con tu caballo, siempre puedes preguntar a tu entrenador. Y no te preocupes, tu estribos magnéticos de seguridad no afectan a tus espuelas: puedes seguir utilizándolas normalmente.