¿Puede la mantilla afectar al ajuste de la silla de montar?
Ajustar la silla de montar correctamente a tu caballo es primordial para garantizar su seguridad y bienestar. Una silla de montar mal ajustada puede, de hecho, causar dolor de espalda, espasmos y disminuir el rendimiento del caballo. Una silla de montar que no se ajusta correctamente puede ser dolorosa, lo que hace que tu caballo se sienta incómodo durante el paseo. Pero, ¿sabías que incluso un tipo incorrecto de almohadilla para la silla de montar puede afectar al ajuste de la misma?
La importancia de un sillín bien ajustado
Cuando compras una silla de montar para tu caballo, lo más importante es asegurarte de que la silla se ajusta bien al lomo del caballo. Por desgracia, muchos jinetes cometen el error de no ajustar la silla de montar. Lo ideal es que, al poner una silla de montar en el lomo del caballo, ésta permanezca en el lugar correcto, sin deslizarse ni moverse hacia los lados, y con suficiente espacio entre la cruz y la columna vertebral.
La idea es poner la silla de montar sobre el lomo del caballo sin un protector de silla para comprobar que se ajusta correctamente. Esto se debe a que una almohadilla de silla de montar demasiado gruesa, por ejemplo, puede hacer que la silla de montar no se ajuste correctamente, o causar la ilusión de que sí se ajusta al caballo.
Una silla de montar mal ajustada puede provocar, por ejemplo, que se produzcan
- Dolor de espalda para el caballo
- Espasmos
- Disminución del rendimiento
- El caballo puede comportarse mal durante el paseo debido a la incomodidad de la silla de montar
¿Qué poner bajo la silla de montar?
Por supuesto, todo el mundo sabe que una almohadilla para la silla de montar es imprescindible cuando se monta. Sin embargo, la finalidad de una mantilla es hacer que el cuero se asiente más cómodamente sobre el caballo, y absorber el sudor. Así se evita que la silla de montar roce con la piel y provoque quemaduras por sudor y pérdida de pelo.
En una situación perfecta, la silla de montar no necesita nada más que un cojín normal debajo. Sin embargo, en algunos casos, los jinetes necesitan poner algo más de acolchado debajo de la silla, por ejemplo:
- Pieles de oveja
- Almohadillas de gel
- Almohadillas absorbentes de golpes
- Almohadillas que evitan el deslizamiento del sillín
Lo primero que hay que hacer después de ajustar la silla de montar es asegurarse de que la silla se ajusta incluso con su almohadilla. Por ejemplo, una mantilla de silla de montar demasiado grueso puede hacer que la silla se balancee de un lado a otro, o de un lado a otro.
Por otro lado, un protector de silla de montar demasiado delgado podría no absorber el sudor lo suficientemente bien y podría causar problemas en la piel.
Acuérdate siempre de pedir a un montador profesional que venga a ajustar tu silla de montar al caballo. Cuando sea necesario, también pueden orientarte sobre el uso de almohadillas de gel y otras almohadillas debajo de la silla.
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